«El punto álgido de la literatura cómica de la era Brezhnev (…) es el libro de Venedikt Eroféiev Moscú-Petushkí. Este clásico bañado en vodka de Eroféiev es el relato del intento de un hombre roto de ir de un sitio a otro en una era de absoluta podredumbre social.» David Remnick
De acuerdo con los hechos que el lector va descubriendo (en orden todo menos lineal), un obrero del tendido de cables es despedido de su trabajo por enviar a sus jefes unos gráficos detallados en los que trataba de buscar correlaciones entre la "productividad" de sus compañeros y su consumo de alcohol. Ante esta situación, el protagonista (de nombre Venedikt Eroféiev, igual que el autor) se abandona a una borrachera interminable que le lleva al punto en que «la frontera entre la razón y el corazón desapareció y ambos empezaron a repetirme al unísono: "¡Vete, vete a Petushkí! ¡Tu salvación y tu alegría están en Petushkí!"»
A un tiempo cómico, brutal y poético, Moscú-Petushkí fue escrito en 1968 y durante años sólo pudo circular en su país en hojas mecanografiadas. En el extranjero, fue saludado como una obra maestra desde su primera publicación en Jerusalén en 1973.
Lea las reseñas de Qué leer y de La torre del Virrey, y el comentario del libro en el blog de Kiko Amat. Escuche también el comentario en Icat FM (en catalán). Sobre la adaptación teatral de la obra en España, vea este enlace.